Es importante porque son una de las partes más visibles y seguramente, querremos que tengan un buen aspecto y tacto.

Muchas personas cuidan el aspecto de sus manos haciéndose la manicura o adornándolas con anillos y pulseras, pero los accesorios no van a evitar que se vea que tienes la piel seca si es así. De hecho, cuantas más cosas te pongas para adornar tus dedos o muñecas, más se fijarán en tus manos y se darán cuenta de que no las tienes muy cuidadas. Por tanto, si este es tu caso o crees que tienes las manos bien pero conocer una rutina de cuidado para aplicártela, tienes que leer estos cinco consejos que te vamos a mostrar.

1. Hidratación

Para reducir la sequedad de la piel es importante utilizar una crema hidratante o de manos de alta calidad. Asegúrate de optar por un producto que contenga manteca de karité, ya que esto ayuda a fijar la humedad de la piel. También es ideal elegir un producto que contenga un aceite como el de oliva o el de coco, ya que suelen ser muy hidratantes. Además, es importante saber qué crema usar, pero también cuándo usarla, ya que el mejor momento es justo después de la ducha para fijar la humedad en la piel. Es importante hidratar las manos con más frecuencia durante los inviernos, ya que las altas temperaturas pueden hacer mella en la piel.

2. Nunca te cortes las cutículas

A la mayoría de nosotros nos enseñan desde pequeños que es mejor cortar nuestras cutículas que arrancarlas. Aunque cortarlas es la mejor alternativa de las dos, uno de los secretos mejor guardados del cuidado de la piel que las modelos de manos recomiendan para tener unas manos más bonitas es no cortar las cutículas. Cortar las cutículas no sólo abre la piel a las bacterias e infecciones, sino que también causa irritación y fomenta que las cutículas vuelvan a crecer más rápido.

En realidad, la mayoría de las veces no es necesario quitar las cutículas. Después de la ducha, utiliza un palito de madera para empujar las cutículas hacia atrás y aumentar la longitud del lecho ungueal. Para reducir la sequedad y aspereza de las cutículas, utiliza una pomada hidratante fuerte o vaselina.

Incluso cuando tomamos medidas preventivas, las cutículas pueden resecarse, endurecerse y doler. Si es absolutamente necesario eliminar las cutículas, utiliza un producto para eliminarlas o déjalo en manos de un profesional.

3. No te laves las manos en exceso

Actualmente, esto es un poco contradictorio, ya que desde la pandemia mundial, la mayoría de nosotros nos lavamos las manos más que nunca. Por desgracia, lavarse las manos con demasiada frecuencia puede provocar sequedad.

Por suerte, hay cosas que podemos hacer para evitar que el lavado de manos sea un problema. Para conseguir una piel más suave, sustituye algunos lavados por un desinfectante de manos nutritivo. Asegúrate de aplicar crema de manos o loción hidratante entre lavados para ayudar a reducir aún más la sequedad.

4. Cuida las manos del frío

Es importante mantener las manos protegidas de las bajas temperaturas. Asegúrate de llevar guantes cuando haga frío en el exterior. Si vas a pasar mucho tiempo al aire libre, considera la posibilidad de utilizar un producto que contenga cera de abeja para retener la humedad y evitar que la piel se agriete. Esta puede ser una buena opción si esquías o haces snowboard o si piensas pasar mucho tiempo fuera quitando la nieve.

5. Usa protector solar en las manos

Proteger las manos durante los meses de verano también es importante. La protección solar ofrece beneficios a corto y largo plazo para tu piel. Evitará el riesgo de quemaduras solares y ampollas y reducirá los daños en la piel con el paso del tiempo.

Si sigues estos cinco consejos conseguirás tener unas manos con un aspecto suave y saludable. Si, por el contrario, ya tenías una rutina de cuidado de manos y aquí has leído aspectos que no llevabas a cabo, aduéñate de los consejos que mejor te vengan.