Con el cambio de estación el tiempo mejora, hay más horas de luz y retomamos algunas actividades suspendidas durante el invierno. Es el momento de la limpieza de primavera, que reporta beneficios a la salud y es fundamental para el buen funcionamiento de la casa.
Sin embargo, si no tienes claro cómo afrontar los cambios y te dan algo de pereza, este artículo te ayudará a empezar el año con mucho ánimo. ¡Adelante!
¿Por qué te cuesta tanto hacer los cambios de temporada?
Sin duda, a veces preferimos que las cosas sigan como están y no tener que adaptarnos a lo que se aproxima. Además, esta limpieza incluye muchos aspectos que, en conjunto, pueden ser percibidos como un caos difícil de manejar. Es natural que tiendas a desmotivarte.
Por otra parte, algunas personas sienten la llamada astenia primaveral, una sensación pasajera de fatiga física e intelectual sin una causa orgánica identificable. Es más frecuente entre los 20 y los 50 años y se estima que afecta al 2 % de la población. Los consejos que vamos a darte y algunos datos interesantes te ayudarán a sobreponerte y este año harás ¡la mejor limpieza de tu vida!
¿Qué necesitas para afrontar con éxito la limpieza primaveral?
¿Cómo hacer la limpieza de primavera?
Uno de los mejores consejos que podemos darte es ventilar y limpiar la casa al mismo tiempo. Abre las ventanas para que haya ventilación cruzada mientras estés trabajando. No está de más que dividas las tareas entre los que viven en casa: con un poco de música y compañía, todo es más divertido.
Líbrate de lo superfluo
Una de las metas de la limpieza de primavera es descartar lo que ya no sirve o no usas. Esto se aplica a cualquier área de la casa, pero especialmente a los armarios y el trastero.
Cuando revises tus cajones o archivos, deshazte de papeles, folletos, publicidad o cualquier otro documento innecesario. Vende lo que ya no uses o dónalo a alguna asociación benéfica y así podrás desocupar mucho espacio.
Limpieza de las superficies grandes
Las puertas y las paredes merecen una atención especial. Lo primero es limpiar molduras y rincones con un plumero para eliminar el polvo y las posibles telarañas. Lava estas zonas con jabón neutro diluido en agua. Un dato importante es completar de una tirada cada superficie, para no dejar marcas. Cepilla los cuadros y demás adornos por ambas caras antes de volver a colgarlos.
El trastero
Este espacio suele acumular muchos objetos inútiles, que puedes donar, vender o simplemente tirar a la basura. Empieza por sacar todo lo que haya dentro para poder quitar el polvo y fregar el suelo. Aplica algún insecticida y al día siguiente guarda en cajas lo que decidas conservar, con una lista pegada por fuera que describa su contenido.
Los armarios
Si quieres limpiar a fondo, es imprescindible vaciar completamente el armario antes de pasar un trapo para limpiar las baldas y las puertas. Déjalas abiertas para que se seque y se ventile mientras seleccionas la ropa, zapatos y bolsos que piensas seguir usando. Retira la ropa de invierno y guárdala limpia en otro lugar.
Si tienes un problema de humedad, coloca un par de tazones con arroz, cierra las puertas y déjalos dentro durante un día. Después, guarda las pertenencias de forma ordenada y no olvides poner bolsitas con popurrí para perfumar.
En la cocina
Con todos los armarios y cajones desocupados, pásales una bayeta con detergente, enjuaga y deja secar. En la cocina y la encimera necesitarás usar un producto desengrasante, así como en el horno y en la campana extractora.
Vacía la nevera, desmonta las estanterías y lávalas con lavavajillas diluido. Al final, enjuaga con una mezcla de agua y vinagre para eliminar los malos olores.
Lava la grifería y usa un producto antical para eliminar los depósitos. Usa desengrasante en los azulejos y al final aplica un producto limpiacristales para que queden brillantes. Termina barriendo y fregando el suelo con desinfectante.
Un baño impecable
Como has hecho con otros espacios, debes sacar todo lo que haya y vaciar completamente el baño. En la ducha, usa un cepillo y un producto para el moho, insistiendo en las juntas de los azulejos y en los rincones.
Limpia el lavabo y el váter, frotando con un trapo empapado en lejía diluida y después enjuaga y seca, para poder limpiar el suelo. Termina con el espejo usando el limpiacristales y una bayeta que no suelte pelusa y aplica un antical en la grifería.
En las habitaciones
Lo fundamental es guardar los edredones y las mantas, ventilar bien y prestar especial atención a los textiles. Es recomendable lavar las cortinas y aspirar cuidadosamente las alfombras, antes de enrollarlas para limpiar el suelo.
Elimina los ácaros poniendo el colchón al sol espolvoreado con bicarbonato. Al día siguiente, aspíralo por ambas caras y colócalo en la cama, dándole la vuelta. Además, descarta las almohadas y sustitúyelas por unas nuevas fabricadas con material antiácaros.
Como has podido ver, para la limpieza de primavera es esencial que te organices y todo resultará más sencillo. De esta forma, disfrutarás de un hogar más saludable y cómodo durante todo el año. Si tienes interés por el tema, visita nuestra web y acude a estos profesionales.