Esto es muy habitual, porque están acostumbrados a comer mucho cuando hay para así no pasarlo tan mal cuando no haya.

Pero ésta no es la única razón por la que algunos gatos mendigan. No importa la razón, la obsesión por la comida y la mendicidad y/o el robo de comida pueden detenerse siguiendo estas sencillas reglas.

1. Despejar la encimera

Cualquier comida que se deje en la encimera es susceptible de que tu gato le haya dado un mordisco. Tengo un amigo que hizo magdalenas, las dejó en la encimera para que se enfriaran y más tarde encontró una marca de mordisco en todas y cada una de las magdalenas.

2. Dar de comer a los gatos primero

Alimenta a tus gatos justo antes de sentarte a comer. Aunque sólo sean unas golosinas, darles algo de comer debería distraerlos de tu plato de comida. Si están ocupados con sus propias golosinas, se interesarán menos por lo que tú tienes.

3. ¡Que no coma de tu plato!

Está más que demostrado dar a tu gato lo que te sobra del plato es un desastre, porque entenderá que siempre que haya comida en ese plato es mínimo tuya t suya. Los gatos seguirán mendigando si se les alimenta del plato, porque han recibido una recompensa en forma de golosina.

4. Ignorar el comportamiento

Para los gatos implacables que siguen intentando comerse tu comida, bájalos suavemente al suelo sin establecer contacto visual ni decir una palabra. Es posible que tengas que repetir este paso muchas veces seguidas, ya que vuelven a levantarse como un resorte, pero finalmente la ausencia de recompensa equivale a la ausencia de mendicidad. Los gatos no repiten comportamientos para los que no hay recompensa.

5. Pon a los gatos en otra habitación

Cuando todo lo demás falle, pon a tus gatos en otra habitación a la hora de comer. Dales unas cuantas golosinas y algunos juguetes para que jueguen solos, y déjalos fuera de la vista durante la hora de la comida.

6. Contra condicionamiento

Detén el hábito de mendigar de tu gato quitándole el poder de sus propias rutinas alimentarias. Por ejemplo, si le gusta picar por la noche y tus gatos quieren lo que hay en el bol de patatas fritas, acostúmbralos a ver el bol vacío mientras ves la televisión. Pronto el cuenco no significará nada para tus gatos, y podrás llenarlo con tus propias golosinas sin encontrar una nariz de gato en él. Para mejorar esto, da a tus gatos un tentempié mientras que tú estás con tu bol. Al fin y al cabo, a todo el mundo le gusta picar mientras ve la televisión.

7. Desterrar el aburrimiento

La ansiedad y el aburrimiento también pueden hacer que un gato se obsesione con la comida. Proporciona a tu gato tanto tiempo de juego como de descanso cada día. Proporcionarle juguetes para jugar por sí mismo, árboles para gatos, perchas en las ventanas y otras cosas interesantes que hacer. Siempre que esté solo en casa le ayudará a aliviar el aburrimiento y a desalentar la obsesión por la comida.

Sigue estos pasos y la hora de la comida se convertirá en algo pacífico en lugar de un campo de batalla con los miembros de su familia felina.