Las autoridades ucranianas han finalizado este miércoles las labores de rescate sobre los escombros ocasionados en la víspera por un ataque ruso sobre la ciudad de Kupiansk, en la región de Járkov, que ha dejado finalmente ocho muertos.

Así lo ha confirmado este miércoles el gobernador de Járkov, Oleg Sinegubov, en su cuenta de Telegram. «Desafortunadamente, se han encontrado los cuerpos sin vida de dos civiles más», ha lamentado, sumándose así estas víctimas a los cuatro hombres y las dos mujeres, cuyos cadáveres se hallaron el martes.

Sinegubov ha recordado que dos de las víctimas fueron alcanzadas por el proyectil ruso cuando estaban llevando a cabo de manera voluntaria labores de evacuación de la población civil.

«Los ocupantes atacaron cínicamente con un cohete Grom-E1», ha denunciado el gobernador de Járkov, quien ha informado de que las autoridades ya investigan todas las circunstancias de este nuevo «crimen ruso».