Publicado 20 Apr 2024 18:11 | Actualizado 20 Abr 2024 18:20

El arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, ha presidido este sábado en la parroquia de Mohedas de la Jara la misa funeral por el eterno descanso de Juan Álvarez de Castro, en el tercer centenario de su nacimiento en esa localidad.

Junto al arzobispo de Toledo, concelebraba el párroco, Ángel Verdugo; el vicario para Clero de la Archidiócesis de Toledo, Carlos Loriente; el vicario general de la Diócesis de Coria-Cáceres, Diego Zambrano, el deán y miembros del Cabildo de la Catedral de Coria, y otros sacerdotes, como el párroco de Hoyos donde fue asesinato el obispo, ha informado la Archidiócesis en un comunicado.

La parte musical de la celebración ha corrido a cargo de la Schola Cantorum San Eugenio de Toledo, dirigida por José Manuel Martín-Delgado. Antes de la celebración de la eucaristía, en el Ayuntamiento, ha tenido lugar el acto por el que nombraban Hijo Predilecto de la localidad al obispo Álvarez de Castro, con el descubrimiento de una placa conmemorativa.

Por la tarde, los actos continuaban con la representación teatral de la vida del obispo, y una ruta por el pueblo siguiendo las huellas del prelado. Durante los próximos meses continuarán los actos culturales y otras actividades. El domingo 18 de agosto será la clausura de este III Centenario del Nacimiento en Mohedas de la Jara.

Juan Álvarez de Castro y Muñoz nació el 29 de enero de 1724, y fue bautizado en la parroquia de san Sebastián mártir, el 4 de febrero de ese año como consta en el libro de bautismos. Tras cursar estudios en la Universidad Salamanca y ser ordenado sacerdote, ocupó varios cargos en la Archidiócesis de Toledo antes de que fuera nombrado obispo de Coria en 1790, diócesis que gobernó hasta 1809 cuando fue asesinado por las tropas napoleónicas durante la Guerra de la Independencia cuando tenía 87 años.

Como obispo de Coria destacó por su caridad hacia los más necesitados creando la Casa de la Misericordia y las Juntas de Caridad. Realizó la Visita Pastoral a la diócesis y escribió contra la invasión de Napoleón. También realizó obras en beneficio de su pueblo natal, Mohedas de la Jara.

Los actos de esta conmemoración comenzaron el pasado 4 de febrero, cuando se cumplían los 300 años de su bautismo, y el provicario general de la Archidiócesis, Raúl Muelas, celebró en la parroquia de San Sebastián Mártir la santa misa y descubrió una placa conmemorativa junto a la pila donde recibió el bautismo.

También ese día se inauguró en los salones parroquiales una exposición titulada ‘El nacimiento de un obispo’ donde se muestran la vida de Juan Álvarez de Castro y Muñoz.

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