5 señales que demuestran si una dieta de moda no es beneficiosa
Si aplicas estas cinco señales antes de hacer la típica dieta que se pone de moda en ese momento, podrás saber si vale la pena hacerla o no.
¿Quieres perder peso para mejorar tu salud o para una ocasión especial? Lo más probable es que ya hayas decidido ponerte a dieta con la esperanza de perder esos kilos rápidamente. Sin embargo, hay un problema, no todas las dietas funcionan. De hecho, las investigaciones muestran que solo el 20% de las personas con sobrepeso son capaces de perder peso y mantenerlo durante al menos un año. Sin embargo, no todo es tan negro, es decir, mucha gente que quiere perder peso, realmente lo hace. Lo que ocurre es que perder peso con dietas milagro es muchísimo más complicado que hacerlo con una nutrición saludable y ejercicio regular. Esto se debe a que este tipo de alimentación y nuevo comportamiento te permite adaptarte tanto a ti como a tu cuerpo. Puesto que las dietas de moda se centran en perder peso rápido, no en mantenerlo. Por tanto, depende de lo que desees, serán buenas para ti o no.
Si evitamos estas dietas que prometen demasiado y no cumplen lo prometido, podremos evitar el hambre, la frustración y los efectos de la mala alimentación. Puesto que estos efectos son los que hacen a la mayoría de personas dejar una dieta. Por tanto, a continuación, te voy a mostrar estos signos para que puedas decidir si la dieta que vas a empezar te conviene o no.
1. El plan promete resultados milagrosos
Las promesas de cambios extremos siempre deberían suponer una bandera roja. Sobre todo, si son dietas que garantizan resultados irreales súper rápidos. Tales como perder 10 kg en una semana, curarte la diabetes o que gracias a esa dieta tengas que dejar “x” medicamento que tomes.
No obstante, seguramente que con estas dietas extremas se pierde peso, pero lo más probable es que no se mantenga. Y, en el proceso, tu cuerpo puede verse privado de los nutrientes clave que necesita para funcionar bien. Es decir, cuando reduces las calorías que tomas de manera drástica, tu cuerpo descompone el tejido muscular. Esto puede provocar que cuando recuperes el peso que perdiste, tu metabolismo sea más lento y aumentes el porcentaje de grasa corporal.
2. No puedes llevarlo a cabo
Algo no es sostenible o insostenible, sino que depende de la persona, algunas pueden soportar más y otras menos. Por ejemplo, muchos planes exigen a contar las calorías que toman diariamente. No obstante, aunque actualmente hay aplicaciones que nos ayudan, sigue siendo una tarea tediosa. Otra cosa que provoca abandonos de las dietas es que haya que comprar alimentos raros de encontrar y hacer recetas complicadas.
3. La dieta se basa en que compres alimentos caros que ellos venden
Los alimentos dietéticos preenvasados, las barritas y los batidos suelen ser muy caros. Y, aunque algunos productos están bastante bien, tener que invertir esa cantidad de dinero mensualmente no es sostenible para todos. Por lo que, las dietas que basan la alimentación en este tipo de productos no suelen ser recomendables. Puesto que están destinadas a ganar dinero con los productos y no creando un menú equilibrado combinado con ejercicio que te ayude realmente.
4. La dieta incluye alimentos «buenos» y alimentos «malos»
Esto sería otra red flag, puesto que cualquier dieta que fomente el pensamiento de blanco o negro, etiquetando los alimentos como «buenos» o «malos» no te va a ayudar a largo plazo.
Llamar ‘malo’ a cierto tipo de alimentos y obligarte a ti mismo a no volver a consumirlo genera una mala relación con la comida. Además, cuanto más nos prohíben algo, más ganas tenemos de hacerlo. De hecho, cuando se intenta seguir una dieta estricta, ceder a los antojos puede llevar a sentimientos de remordimiento y vergüenza. Esto, a largo plazo, supondrá un fracaso de la dieta. Además, eliminar alimentos puede significar limitar la nutrición y quitarle parte del placer a la comida.
5. Te aseguran que adelgazarás solo con la dieta y sin ejercicio
A menudo, cuando se pierde una gran cantidad de peso en un corto período de tiempo, también estamos perdiendo masa muscular. Esto se debe a que la construcción y el mantenimiento de la masa corporal magra, tejido muscular, en realidad ayuda a impulsar el metabolismo del cuerpo y le ayuda a quemar más grasa. Por ello, cuando se quiere llevar a cabo una vida saludable, es importante, a parte de la dieta, incorporar el entrenamiento de fuerza o resistencia con estiramientos y ejercicios aeróbicos. Esto te ayudará a crear tono muscular, aumenta la resistencia y mejora el equilibrio.
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