.

Publicado 4 Jul 2025 13:41

GUADALAJARA 4 Jul. –

El Ayuntamiento de Guadalajara va a lanzar una nueva campaña a través de las redes sociales para abordar el creciente problema y las quejas por los excrementos y orines de las mascotas en la vía pública, lo que afecta a la imagen, salud pública y mobiliario urbano de la ciudad.

Desde el Consistorio, a través de sus concejales de Limpieza y Seguridad, David García y Chema Antón, se reconoce que si bien la mayoría de los ciudadanos cumple con la normativa, hay una minoría que no lo hace, de ahí esta campaña dirigida precisamente a «educar antes que sancionar», pero aplicando multas cuando es necesario.

Se trata de una campaña de concienciación y educación en colaboración con la Policía Local, enfocada a la limpieza, bienestar animal y la convivencia respetuosa en la ciudad, porque «tener un perro es muy bonito pero se necesita una responsabilidad», ha apuntado el concejal de Limpieza, reconociendo que el incremento de quejas vecinales por excrementos de animales en las vía pública.

Así, hasta el momento, en los primeros seis meses del año la Policía Local ha aplicado ya un centenar de sanciones relacionadas con la ordenanza de limpieza en general, incluyendo el tema de las mascotas.

No es la primera campaña de este tipo que se va a llevar a cabo, pero ahora se ha visto la necesidad de incidir en ello reconociendo que se habían incrementado las llamadas de los ciudadanos.

Para el concejal de Seguridad, no se trata de meter miedo a nadie, sino de educar y concienciar sobre un problema persistente, e insistir en que aunque la estrategia se centra en la educación y la concienciación, el Ayuntamiento está preparado para aplicar sanciones cuando sea necesario.

Una vez más, desde el Consistorio recuerdan que la normativa actual establece obligaciones que hay que atender como es la llevar bolsas para las heces de los animales y depositarlas después en papeleras, limpiar las micciones con agua mezclada con vinagre o producto higienizante no jabonoso y la prohibición de depositar los excrementos en zonas infantiles, jardines, aceras y lugares de tránsito peatonal.

También recuerdan que la infracción leve puede llegar hasta los 750 euros en el caso de no llevar bolsas para recoger los excrementos o no llevar botella para limpiar orines; que podrá elevarse hasta los 1.500 euros, y muy grave, que puede llegar a los 3000, para aquellos casos en los que el dueño de la mascota no recoja las haces de la vía pública.

Según Antón, los orines causan «corrosión, sobre todo en las farolas» y daños en el mobiliario urbano de la ciudad, de ahí que haya insistido en la importancia de ser responsables a la hora de tener mascotas.

«Hay que ser consecuentes y pensar en el resto de los ciudadanos», ha manifestado.

Si bien las sanciones se están ejecutando, según Antón, parece ser que además del problema de los excrementos, se está detectando que algunos ciudadanos dejan también cartón, vidrios y hasta colchones delante de los contenedores de la vía pública, de ahí que haya incidido en una mayor concienciación al respecto.

«El objetivo es que entre todos hagamos una ciudad más limpia y responsable, una ciudad de primera», han concluido.

Comparte esta noticia en tu red social favorita

Publicidad

CASTILLA-LA MANCHA

Publicidad