Los Diablos de Mazarulleque preparan sus cencerros para recuperar del olvido a su Endiablada el próximo sábado

CUENCA, 4

El próximo sábado, 8 de febrero, la localidad conquense de Mazarulleque celebrará misa en honor a San Blas al compás de una quincena de Diablos y Diablas que irrumpirán en la celebración con sus cencerros.

Según informa el Ayuntamiento a Europa Press, los Diablos y sus estrepitosos cencerros se colocarán bajo la imagen de San Blas para recitar la docena de versos tradicionales como preludio a la misa, que dará paso a su vez a una procesión por el pueblo donde se repartirán panecillos y se comerá cocido en hermandad.

Se trata de una tradición similar a esas otras Endiabladas que para San Blas y la Candelaria se celebran y celebraban en Cuenca. En Mazarulleque mantenía su apogeo hasta mediados del siglo XX, pero con el éxodo rural se fue reduciendo paulatinamente.

El tesón de las gestoras de la Hermandad de San Blas consiguió mantener la llama y de un tiempo a esta parte, recuerda el Ayuntamiento, se han renovado esfuerzos y se ha contado con inversión de la Diputación. De la mano del etnógrafo Santiago David Domínguez, se ha podido documentar y estudiar una celebración que volverá a brilla.

De este modo, en 2024 se convocó ya en el pueblo un Primer Encuentro de Endiabladas de la Provincia de Cuenca, evento que sirvió a los diablos locales para recibir ideas y para retomar algunas de las cosas que se habían perdido con el paso del tiempo, como los tradicionales trajes.

Este 2025 saldrán, por fin, de nuevo vestidos diablos y diablas, devolviendo el color a esta valiosísima tradición que en pueblos como El Hito o Almonacid del Marquesado han demostrado su aceptación por parte de locales y visitantes.