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Publicado 24 Nov 2025 05:01

· Fuente: Europa Press

El primer ministro niega que el debate haya terminado y la oposición pide su dimisión

La sociedad eslovena ha rechazado este domingo en referéndum una ley impulsada por el Gobierno y aprobada por el Congreso para legalizar el suicidio asistido para pacientes terminales al que se ha opuesto un 53 por ciento del electorado.

Con más del 99,9 por ciento del escrutinio realizado y una participación de menos del 41, la Comisión Electoral Estatal ha informado de que el 46,57 por ciento de los eslovenos ha votado a favor, mientras que el 53,43 lo ha hecho en contra.

Por su parte, el primer ministro esloveno, Robert Golob, ha defendido la propuesta alegando que «no se trata de una cuestión política, sino de dignidad, Derechos Humanos y elección individual», y que quienes han impulsado la norma «se preocupan por que sus semejantes terminen sus vidas con dignidad».

El mandatario se ha dirigido también a la oposición, advirtiendo de que «el desafío (…) aún persiste». «Todos coincidimos en dos cosas: nadie debe ser obligado a un sufrimiento insoportable y prolongado. Y nadie debe ser obligado a quitarse la vida. Como sociedad libre y compasiva, debemos garantizar ambas cosas», ha declarado.

Paralelamente, las diputadas Tereza Novak, del Movimiento por la Libertad, y Natasa Sukic, de La Izquierda, ambas formaciones pertenecientes a la coalición gobernante, han defendido que el resultado del referéndum corresponde únicamente a la propuesta recogida y no alude de ningún modo al Ejecutivo.

Por contra, en la oposición, el vicepresidente del Partido Demócrata Esloveno (derecha), Ales Hojs, ha considerado la consulta como «una gran moción de censura a la coalición actual».

«Preveo que el primer ministro dimitirá a partir de mañana», ha aseverado, agregando a sus previsiones que su formación cuenta con aglutinar una «mayoría constitucional de razón» en la próxima legislatura, con el objetivo de derogar las medidas y leyes adoptadas por el actual Ejecutivo.

De modo similar, su homóloga en el partido democristiano Nueva Eslovenia (NSi), Mojca Sojar, ha considerado que «este es un nuevo voto de censura contra el Gobierno, que pretendía instaurar una danza de la muerte». «El resultado demuestra una vez más que un cambio de gobierno no solo es necesario, sino también posible», ha añadido.

Al hilo, el activista político Alez Primac, una de las principales figuras de la oposición a la ley, ha celebrado el triunfo de «la compasión, la justicia y la solidaridad», según ha recogido el diario esloveno ‘Delo’. Para él, Eslovenia se ha pronunciado «a favor de la vida» y ha rechazado la reforma sanitaria, de pensiones y social del gobierno, basada en la muerte por envenenamiento».

Por contra, la Alianza Mi Vida, Mi Derecho ha mantenido en un comunicado recogido por la agencia STA que este derecho se hará efectivo más pronto que tarde, mientras que el académico Andrej Pleterski, uno de los impulsores del texto y parte de la campaña de la alianza, ha concedido que «es posible que a algunos no les gustaran todas las soluciones de la ley».

Con todo, ha interpretado el resultado del referéndum como «un incentivo para mejorar la ley la próxima vez», ya que, «después de un año, la ley volverá a estar abierta a su aprobación». «Sin duda, se aprobará en el futuro», ha agregado.

La norma legalizaba el suicidio asistido para pacientes terminales, no así la eutanasia, y excluía del mismo a las personas con enfermedades mentales. Para ello, el paciente tendría que presentar una solicitud ante su médico y estar informado sobre otras opciones para aliviar su sufrimiento. Tras varias entrevistas, el caso se remitiría a una comisión especializada para determinar si el cumplimiento del paciente con las condiciones para poner fin a su vida.

La legislación rechazada especifica que el paciente se autoadministraría la sustancia con la presencia en la sala hasta su fallecimiento certificado de un médico y un enfermero titulado. Los profesionales podrían negarse a participar en el procedimiento, si bien sería preciso asignar un sustituto dado el caso.


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