Cerca del 40 por ciento de los desplazados internos en Birmania son niños, según la ONU

UNICEF insta a tomar medidas «urgentes» para proteger la infancia a medida que se recrudece el conflicto

MADRID, 21

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha alertado este jueves de que cerca del 40 por ciento de los 3,4 millones de personas que se encuentran desplazadas a nivel interno en Birmania a causa de la violencia son menores de edad, por lo que ha instado a tomar medidas inmediatas que garanticen la protección de la infancia en el país asiático.

El subdirector del fondo de la ONU, Ted Chaiban, ha indicado en un comunicado que la situación humanitaria está alcanzado cotas «críticas» en Birmania, donde el recrudecimiento del conflicto ha provocado que familias enteras y niños sean sometidos a peligros «sin precedentes».

«Durante mi visita a las áreas más afectadas por el conflicto he podido observar de primera mano el impacto devastador que están teniendo los enfrentamientos sobre la infancia, una crisis que se ha exacerbado debido al paso del tifón ‘Yagi’, que ha provocado fuertes inundaciones y ha afectado a millones de personas», ha advertido.

«Me sentí desolado al enterarme de que el 15 de noviembre un ataque alcanzó la iglesia de Kachin donde había niños jugando al fútbol, matando a nueve personas, siete de ellas niños», ha lamentado antes de explicar que ha visitado la zona para comprobar de primera mano «la vulnerabilidad» a la que son sometidos los menores y otros civiles en estas áreas. «Hay que defender el Derecho Internacional para protegerlos de estos ataques brutales», ha añadido.

En este sentido, ha aclarado que a lo largo de este año al menos 650 menores han muerto o han quedado mutilados en el país a causa de la violencia. Estos niños representan el 32 por ciento de las más de mi víctimas civiles que dejan las minas antipersona y los restos de explosivos.

«El creciente uso de armas mortíferas en zonas civiles, incluidos los ataques aéreos y las minas (…) restringe en gran medida los ya de por sí muy limitados espacios seguros con los que cuenta la infancia», ha afirmado antes de matizar que se trata de una situación «calamitosa».

Chaiban ha dicho haberse reunido con las partes enfrentadas y ha insistido en la necesidad de que todos ellos «garanticen la entrega de ayuda segura y sin obstáculos, especialmente para los niños y familias más vulnerables». «Hay que eliminar las barreras administrativas y garantizar unas normas mínimas de funcionamiento», ha puntualizado.

«El acceso sigue estando limitado por el conflicto armado en curso, la inseguridad, los impedimentos burocráticos y la falta de telecomunicaciones y de equipos de protección personal», ha sostenido, no sin antes lamentar que los esfuerzos de UNICEF se han visto «gravemente obstaculizados por una financiación significativamente baja, menor al 25 por ciento de lo solicitado.

«El compromiso de UNICEF de defender los derechos de los niños sigue siendo firme. Instamos a todas las partes en conflicto a dar prioridad a la protección de los niños y a garantizar un acceso humanitario seguro, oportuno y sin obstáculos. (…) Los niños de Birmania no pueden permitirse esperar más», ha zanjado.