El Gobierno prorroga hasta 2026 las tarjetas de identidad de extranjero para los afectados por el conflicto en Ucrania

MADRID, 1

El Ministerio del Interior ha prorrogado hasta el 4 de marzo de 2026 las tarjetas de identidad de extranjero a personas afectadas por el conflicto en Ucrania beneficiarias de protección temporal, ya que «persisten los motivos que dieron origen a su concesión», según se desprende del Boletín Oficial del Estado (BOE).

En este sentido, recuerda que el 4 de marzo de 2022, el Consejo adoptó la Decisión de Ejecución (UE) 2022/382, por la que se constata la existencia de una afluencia masiva de personas desplazadas procedentes de Ucrania, con el efecto de que se inicie la protección temporal. De conformidad con la Directiva, la protección temporal se aplicó durante un período inicial de un año, hasta el 4 de marzo de 2023, y con posterioridad se prorrogó automáticamente por un año más, hasta el 4 de marzo de 2024. El año pasado se amplió el plazo hasta el 4 de marzo de 2025.

Asimismo, el documento recoge que no será necesaria la obtención de una nueva Tarjeta de Identidad de Extranjero por razones de «eficacia» y «eficiencia» y que se prorroga «directa y automáticamente», hasta el 4 de marzo de 2026, la validez de las tarjetas ya expedidas.

Además, destaca que esta prórroga se comunicará a las Instituciones de la Unión Europea con el fin de que sea conocida por los demás Estados miembros. «Se trata de un asunto que no sólo tiene repercusión en el territorio nacional, sino también en el territorio de los demás Estados miembros, por el que están habilitados a circular los titulares de dichas tarjetas durante un tiempo máximo de 90 días, dentro de cualquier periodo de 180 días, así como en las fronteras exteriores de todo el espacio Schengen», expone.

Según ha precisado el Gobierno este sábado, España ha concedido protección temporal a más de 236.000 ciudadanos ucranianos desde que el 9 de marzo de 2022 se activara este mecanismo de protección extraordinario que otorga de manera inmediata permiso de residencia y de trabajo a los desplazados por la invasión rusa.