Trib.- Un jurado popular declara culpable de asesinato al acusado de matar a un hombre en Ugena

Publicado 17 Nov 2025 17:51

· Fuente: Europa Press

TOLEDO 17 Nov. –

Un jurado popular ha declarado por unanimidad culpable de un delito de asesinato a A.K.S, juzgado este lunes en la Audiencia Provincial de Toledo por matar a golpes y descargas eléctricas de un táser a otro hombre con el que había mantenido un altercado en días previos en la localidad toledana de Ugena.

Se han contemplado por unanimidad del jurado las atenuantes de reparación del daño y confesión, que el representante del Ministerio Fiscal ha incluido en sus conclusiones finales, pues ha terminado rebajando de 20 a 12 años y 6 meses de prisión la pena.

No obstante, el jurado ha considerado que no procede ni suspensión de la pena ni solicitud del indulto para el procesado.

En la vista celebrada este lunes en la Sección Primera no se ha podido juzgar por estar en rebeldía a R.E.G., para el que el Ministerio Fiscal pide un año de prisión por un delito de encubrimiento.

El acusado ha explicado que conocía a la víctima, J.R.D, conocido como ‘Santiago el Abuelo’, de comprarle droga en su casa situada en la plaza Mayor de Ugena ya que era consumidor habitual de cocaína.

Ha asegurado que el 16 de febrero de 2021, días antes de los hechos que hoy se están juzgando, él tuvo una disputa con el fallecido porque fue a su casa a comprarle droga pero al darle menos cantidad que la que le tenía que dar, según el acusado, generó una discusión entre ambos. Apunta que la discusión no fue muy acalorada, y que, tras insistir en que le había dado menos cantidad de la acordada, se fue de la casa. «No hubo agresión ni nada», ha dicho.

Centrándose en el día de los hechos, el 23 de febrero, el acusado ha explicado que ese día volvió a la casa de ‘el abuelo’ para comprarle droga de nuevo. Fue acompañado de una mujer, que luego resultó ser menor de 18 años y su novia. Según ha manifestado, ella fue la que llamó al timbre de la víctima porque, según el acusado, si llamaba él podría ocurrir que el fallecido no le abriera tras haber discutido días antes.

A.K.S. no se acuerda de la hora a la que acudieron a la casa, ya que «iba un poquito mal». Tras llamar al timbre, el fallecido abrió la puerta y tras verle, según ha resaltado, ‘el abuelo’ se puso «un poco alterado», pero «no me agredió ni nada».

Ha sido en este punto en el que el procesado ha dicho que el taser utilizado en la agresión no era suyo, sino que era del fallecido, pues estaba dentro de la casa. Apunta que lo que él creía que era una linterna de «unos 17 centímetros», resultó ser un táser. Ha admitido que él cogió este dispositivo, que se encontraban al lado de un mueble, «para agredir» a J.R.D. porque «al lado suyo había una escopeta». «Me asusté».

Ha dicho que sólo usó el táser para «golpear» y que no se dio cuenta que la linterna llevaba añadido un mecanismo táser de descargas. El acusado ha relatado que cuanto entró en la casa, fueron hacia el dormitorio yendo detrás del fallecido. «Le golpeé de espaldas cuando él me habló fuerte, vi la escopeta y le empecé a propinar golpes. Pero él a mí no me agredió ni nada».

Tras reconocer que él estaba «alterado» porque «consumía mucho», ha indicado que los golpes que propinó los dirigió hacia la cabeza, y que cuando comenzó a agredir al fallecido, éste le dijo que le iba a matar.

«El hombre a mí no me llegó a agredir», ha insistido el inculpado en varias ocasiones de su relato. «Me acuerdo que yo le di en la cara. No sé si detrás había algún golpe, que seguramente sí, pero yo sé que le di en la cara», pero «hay cosas que no me acuerdo al cien por cien».

A.K.S., que no recuerda que él introdujera en la boca el táser al fallecido, sí que ha admitido que él sabía que podía matar al ‘abuelo’ por la cantidad de golpes que le había propinado en la cabeza. «Yo en un principio no iba a matarlo», ha subrayado. «Cuando me fui tenía claro que el hombre no iba a estar vivo».

Tras golpear «unas cuantas veces», el acusado cogió la escopeta porque, según ha contado, «estaba alterado y tenía miedo» y cogió el monedero que tenía cocaína. Tras huir de la casa del fallecido, él y su novia marcharon a la hípica porque ella entrenaba allí, donde también estaba el otro acusado R.E.G,. a quien A.K.S le dio la ropa con sangre, la escopeta y el monedero para que deshiciera de todo.

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